Tanto tiempo sin entrar a estos suburbios
Tan solo de escribir mi clave, me sentí emocionada de encontrarme con la adolescencia de aquellos años en que escribía prácticamente todos los días. No lo sé, está todo tan cambiado, me parece tan bonito, extraño el blogger de antes. Los cambios de la vida pues.
Uf! Han pasado tantas cosas en mi vida, que sería imposible decirlas todas, porque quizás ni yo misma las recuerdo.
Creo que son las épocas auspiciosas las que siempre me traen hasta acá. Eso es bueno (trece trece)
Estoy enamorada. Estoy extasiada con el amor de un hombre blanco que ama y me ama sin pedir nada, o casi nada que no es lo mismo pero es igual (8) Naaaa, en serio, mi corazón está más rojo y brillante que nunca. Fue un cachetazo en la cara el amor de este ser tan inmenso.
Y aunque él diga que es solo algo racional -y parte de la biología del hombre - el hecho de que estemos juntos, yo sé que eso no se lo cree, quisiera, pero es demasiado bueno como para creerselo. Si es así, y peco de inocente (naaa) o idealista, le regalo parte de mi universo para que entre en él y se deje sorprender.
Lo cierto es que lo amo.
Así de simple, sin un "pero" que le siga ni nada en medio de eso. Lo amo.
Durante algún tiempo -mucho- estuve sin escribir nada, sin tener inspiración más que para lo que me piden hacer en la puta universidad. No escribía nada para mi, nada que no tuviese reglas y cantidad de palabras. Pero desde hace un par de días, estoy escribiendo como loca, desaforada, gastando tinta, mis dedos se tropiezan porque no pueden ir a la velocidad que estoy pensando. Ay gran zanahoria!
Es bueno amar en serio.
Gracias a mi ONVRE (breve historia: sí, onvre en vez de hombre porque como tiene faltas de ortografía, le puse así. Fin) por amarme con tanto fervor.
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