No poder
¿Y qué pasaría si realmente yo lo quiero?
Para cuando me decida, él ya se habrá aburrido de esperarme -Suspiró Teresa-
Como cada mañana en que se levantaba el sol,
ella abría sus inmensos ojos con la
esperanza de enamorarse -al fín- y que todo su mundo cambiara.
Desde siempre deseó enamorarse. Algunos quieren ser médicos,
otros bomberos, pero Teresa,
quería ser enamorada.
A su cabeza venían los flashes de sufrimientos por amor,
como en "Lo que el viento se llevó", ella anhelaba bajar corriendo
por escaleras interminables y tener ese beso final de su amado.
El problema es que estaba imposibilitada de amar.
Sentía cariño, eso era indudable, ¿pero amor?
amor como tal, no.
Amor del que duele, del que te duele más que el corazón,
el útero, de ese amor, jamás había sentido.
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