Lo imposible
Todas las noches, absolutamente todas las noches, se tocaba pensando el él.
Creyendo que cada orgasmo, sería un llamado mental.
-Dicen que si dices en tu mente el nombre de alguien a quien necesites ver, es como un llamado a la conciencia de esa persona. Si lo llamo mientras me estoy sintiendo, supongo que es como un llamado doble, supongo-
Cada una de esas noches, ella hizo el llamado, cada día con más intensidad, cada día tratando de que su mente al fin consiguiera alguna respuesta.
Todas las noches, y sin embargo, jamás hubo alguna contesta, llamado inesperado o un mísero suspiro que le indicara que sus llamados ya no serían en vano.
-Quisiera sentirte en realidad, quisiera que tu me hicieras llegar, ir y volver de la manera en que yo no puedo hacerlo, quisiera que me vieras tan descubierta como yo te veo a ti cada una de mis noches. Los días solo me revelan que faltan muchas horas para que se oscurezca y yo te pueda volver a pensar en mi y tu no me contestes. Sería incluso capaz de querer tus migajas. Migas de ti y sería feliz. Eres mi omnipotente/omnipresente.Ahora que el agua hierve, veo como hace mi sangre cuando te pienso en mi. Preparando el almuerzo veo que simplemente, todo me conduce a ti-
Por su naturaleza doméstica, más bien, una auto/imposición a la cual estaba destinada, ella jamás sentía delante de los demás, ni en sus más remotos pensamientos creyó posible la felicidad o un ápice de ella.
-Hay cosas en la vida que son para uno y otras que no. Por ejemplo, mis hermanas nacieron bellas e imponentes, yo en cambio, no destaco ni por mi nombre A mi me tocó ser neutral. Ni muy triste, ni muy feliz.-
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